Djenane María Villanueva Monge

A las órdenes de Fernando Contreras López

¿Periodismo?…  Algunas veces pazco  y las demás agrío …

Djenane María Villanueva Monge se ha movido en un círculo periodístico y político muy cercano al poder y por ende eso es lo que ella representa como comunicadora.  Hija de un ilustre jurista y político, que en paz descanse.

Hermana de la expresidenta de la Corte Suprema de Justicia, a quien conozco desde la facultad de Derecho, la Alcaldía de Paraíso, el juzgado civil y de trabajo de Cartago, el tribunal de Cartago (especialmente en el caso de la estafa Ospino – El Molino) y recuerdo muy bien cuándo y cómo la eligieron magistrada.  La sacada de clavo por mis críticas francas y constantes a la deslucida presidenta de la Corte,  soltó el herrumbre en el debate presidencial de Repretel, 2018.

Su proceder no se aparta ni un ápice las órdenes de la casta codiciosa, al que sirve y tampoco de los partidos políticos corruptos  que la ampara desde el silencio.

En su recorrido periodístico se encuentran su paso por Teletica, La Prensa Libre, Repretel Canal Seis, Informe Once y NC Once. Como se puede observar, el hacer de esta periodista, no se aparta en nada de lo que hacen los periodistas de la prensa canalla.

Por eso durante la campaña electoral de 2018, en la que fui candidato presidencial no me sorprendió, para nada, que ella se uniera a las posiciones ventajistas de ese grupo de periodistas que me atacó sin analizar a fondo mis posiciones políticas.

Djenane María pertenece a ese grupo que se plegó a la visión difundida por La Nación, como cabeza de ese círculo vicioso que ha hecho del periodismo un negocio, pero no un servicio a la ciudadanía como debería de ser. Y alrededor de ese grupo circulan como satélites Semenario Universidad (perversidad), ameliarueda.com, Delfinocr, Elmundocr, Crhoy, y su mismo NC Once, entre otros, donde bajo el alero del ya retirado Alexis Rojas, trataron de afectarme cada vez que la ocasión lo propició, con la venia gozosa de Fernando Contreras, el mandador de los mexicanos.

No lo consiguieron, por ejemplo, cuando trataron de ponerme a última hora a periodistas cercanas a Antonio Álvarez Desanti en una entrevista pactada con Jerry Alfaro.

A ese grupo de periodistas como Alexis Rojas, Jerry Alfaro, Evelyn Fachler ha pertenecido Djenane María Villanueva Monge y, por ende, ella también comulgaba con la idea de que se debía atacar a mi persona por lo que represento como un líder que no tiene inconvenientes ni teme llamar a las cosas por su nombre.

Mi forma directa de ser incomodaba a los periodistas, quienes en vez de reaccionar de manera positiva ante alguien que es capaz de cuestionar al poder con argumentos, lo que hacían era atacarme basados en prejuicios, suposiciones, ideas erráticas y fijas, y guiados por la presunción de que la verdad les pertenece.

La reportera en Costa Rica de CNN en Español, por lo tanto, opera bajo una línea ideológica que se ampara ese poder mediático que olvidó que los grandes principios del periodismo implican el servicio público, con el afán de servir a una ciudadanía ávida de contar con elementos para comprender en toda su extensión cómo opera la realidad diaria y cómo se proyecta hacia el futuro.

Como reportera y presentadora, Villanueva Monge pertenece a esa estirpe que rema entre la política y el periodismo, aunque ella directamente nunca haya incursionado en el primer campo; no obstante, no puede sustraerse a la realidad de su familia, amparada al Partido Liberación Nacional (PLN) desde hace más de medio siglo.

De forma tal, que Djenane María es fiel representante de ese grupo de periodistas que me han adversado sin tomarse la molestia de indagar en mi biografía y en mi carrera como abogado penalista, en la que ya llevo 40 años de labor profesional.

La periodista, que sabe muy bien a los intereses a los que sirve tanto en el país como en sus reportes para CNN en Español, siguió los postulados marcados por los juicios de valor, desde los que me atacaron continuamente durante el desarrollo de la campaña electoral de 2018,  en la que demostré mi entrega incondicional a esta patria con la que vivo comprometido y a la que siempre he servido con entrega y honradez.

En el debate presidencial en Repretel, me lanzó una vil pregunta, ofendiendo a mi esposa y replicando una falsedad propalada por Hulda Miranda del Semenario Universidad. Le desmonté la patraña y Urcuyo tragó grueso. 

¡Una cartagada más!  

¡Otra desabrida villanuevada!