¡Aunque se envuelva mil veces en la bandera… Freddy será!
Freddy Víctor Serrano Vargas armó un escandalillo en redes sociales porque decidí bloquearlo de mi cuenta de Twitter, luego de que el periodista expresara sobre mí conceptos que no estaban apegados a la realidad.
No es que no me guste la crítica. Me encanta y la defiendo con toda mi alma y con tomo mi ser y con toda mi formación como abogado. Lo que no tolero es a la prensa canalla que se disfraza de imparcial y que a todas luces responde a intereses partidarios y empresariales que entran en juego en situaciones cumbre, como sucedió durante la campaña electoral de 2018.
Por eso Freddy Víctor, abiertamente un seguidor del PAC, por diversas razones, no es lo que parece, porque se presenta en redes sociales como si fuera un actor imparcial, que va a velar por el derecho de la libertad de expresión y de prensa, cuando la realidad es que lo ligan intereses afectivos al partido del PAC, lo que significa que cuando emite criterios lo hace pensando en cómo favorecer a sus representados.
Lo inaceptable de un periodista como Serrano Vargas no es que respalde al PAC, porque en nuestra Costa Rica libre y democrática tiene derecho a inclinarse por el partido que más lo acompañe en sus aspiraciones, la dificultad surge cuando ese comunicador se vuelve camaleónico y se presenta ante la opinión pública como imparcial, pulcro, apegado a la ética y a los hechos de los que informa o comenta y la realidad es que no es así.
En el caso de Freddy Víctor se le salen los colores por doquier y aunque en la mayoría de los casos intenta ocultarlos bajo la bandera de la imparcialidad, el lenguaje, las expresiones y los contenidos terminan por evidenciarlo. Ni siquiera irrespetando el pabellón nacional, cuando se convirtió en un taco patriótico usando la noble enseña, como si fuera una enorme tortilla de tela… derroche de exhibicionismo financiado por los muelleros holandeses de Moín, claro está, mucho antes de que se fuera.
Así por ejemplo, al periodista le pareció que la cordialidad y el respeto que tuve con Fabricio Alvarado durante el desarrollo de la campaña de 2018 era una prueba de que ambos nos estábamos aliando contra su querido PAC. ¿Qué ortigó al imparcial comunicador?
Eso hizo que el histriónico Freddy Víctor se precipitara en Twitter a afirmar, el 30 de enero de 2018: “ Fabricio Alvarado y Juan Diego Castro se muestran compadres en contra del PAC”. Ni compadre, ni comadre de nadie.
Afirmación falsa y tendenciosa, sin asideros, apoyada en especulaciones, esa marca que distingue al periódico La Nación y a sus periodistas y medios satélites. Y Freddy Víctor es uno de ellos, chistes incluidos del cafetín o tetín de telenoticias.
En esta comunicación, en apariencia tan básica, Serrano Vargas evidencia que lo que sostiene en su perfil de Twitter, sobre el hecho de que es un defensor de la libertad de expresión no es tan cierto, porque en verdad defiende un tipo de libertad de expresión que se ajuste a los parámetros de sus copartidarios.
Demuestra, también, que comparte y representa los intereses de esa escuela de periodismo que durante setenta años ha construido el medio llorentino, y que tiene a los hechos como un pretexto para contar sus verdades, sus puntos de vista y de esa forma manipular la realidad a su antojo.
Por eso el Serrano periodista en nada se diferencia de sus colegas que siguen esa línea, aunque no les caiga bien. El truco es harto simple: presentarse como un periodista independiente, preocupado por la patria y el rumbo del periodismo crítico. Hasta aquí todo parece bien. La trampa, surge, no obstante, cuando en la práctica ese periodista independiente se apega a ese grupo que juzga, procede con base a prejuicios, descalifica, y lejos de ahondar en los hechos, opta por manejarlos a su antojo. En una palabra, elige manipularlos y así condicionar a la opinión pública.
Y cuando a ese comunicador se le enfrenta y se le cuestiona porque su periodismo es sesgado y alejado de los más altos valores de dicha profesión, se escuda en que se le ataca y se le desvirtúa su hacer. ¡Vaya, vaya!
Es, como habrá podido apreciar el lector, un juego macabro y peligroso, porque ante la opinión pública el periodista se presenta pulcro y sin mancha profesional, pero a la hora de actuar rompe los moldes y su práctica se llena de parcialidades.
En el caso de Serrano Vargas es claro que cuando se trata de su ex patrón APM Terminals intenta dar la idea de que tanto dicha empresa como él, siguen un estricto protocolo de equilibrio y transparencia, pero el periodista sabe muy bien que no es así y que los holandeses están dispuestos a defender sus intereses sin escatimar esfuerzos.
Entonces, lo que procede es que cada parte juegue sus cartas con transparencia, honradez y valentía. En esa línea, sería destacable que Freddy Víctor Serrano Vargas deje de izar la bandera de la imparcialidad y se presente ante sus conciudadanos como lo que es: un periodista abrazado a la bandera rabiamarillo del PAC.
Así, cuando emite criterios, quienes lo siguen en redes sociales – porque su página web, dato curioso, terminó en nada, lo que deja claro, de paso, que como emprendedor Freddy Víctor no obtuvo ninguna victoria-, quienes lean sus posiciones, sabrán, con absoluta claridad, la ideología que lo sustenta, lo inspira y hasta lo puede enardece.
La claridad y el juego limpio, sin embargo, jamás han sido los derroteros por los que se mueve Freddy Víctor Serrano Vargas. Lo veremos en su nuevo puesto en Canal 8. No habrán sorpresas.
Aarón y Freddy se juntaron para retozar y retorcer
El 25 de noviembre del 2017, el enconoso Aarón Chinchilla, abanica a su amigo Freddy Víctor, en una sesgada nota del pasquín de Llorente, intitulada: “Juan Diego Castro dice que revisaría contrato de mega puerto en construcción. Candidato del PIN aseguró que estudiará el tema durante una reunión con sindicalistas de Japdeva y Recope, en Limón.
También se buscó la reacción de la compañía APM Terminals ante la declaración de Castro, pero el ahora experiodista de esa multinacional, Freddy Serrano, explicó que no tenía al vocero oficial de la firma, Kenneth Waugh, a su alcance.
Sin embargo, Serrano facilitó una posición que en otras ocasiones ha externado la empresa sobre el contrato:
“APM Terminals ha cumplido con todos los requisitos técnicos y legales para diseñar, construir y operar la Terminal de Contenedores de Moín (TCM), según la concesión vigente. Por políticas de la compañía no emitimos criterio sobre declaraciones de una campaña política, pues ante todo respetamos el marco legal e institucional que rige un Estado de derecho.
“La decisión del Estado costarricense de construir la TCM responde a un plan maestro de Japdeva (Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica), el cual busca la especialización de terminales en el Caribe, de forma tal que APM Terminals es solo un actor en el futuro logístico eficiente de Limón”, se lee en la declaración.
Luego de la reunión con los miembros de la Fetral, Juan Diego Castro visitó las instalaciones del muelle alemán, a cargo de Japdeva. En ese lugar, los trabajadores lo llevaron por las instalaciones, donde el equipo de la campaña electoral del aspirante presidencial realizó tomas para el video que luego publicó en Facebook. Castro incluso pudo subir a una grúa pórtica y hacer grabaciones allí.