Luis Fernando Cascante Saborío

A la orden del rector Hening de la UCR y al servicio del PAC - FA - LA NACIÓN

Las rabietas panfletarias del bachiller Cascante Saborío

Luis Fernando Cascante, periodista del Semanario Universidad, ya había demostrado cuando trabajaba para La República, su predisposición negativa contra mi persona, tras manipular de una manera lamentable una entrevista que le concedí.

En esa oportunidad, fue necesario un amplio derecho de respuesta, con el fin de aclararle al lector la realidad de lo que yo había afirmado y que en gran parte no correspondía a lo contado por el periodista.

Por eso no resultó extraño que desde las páginas del Semenario Universidad (perversidad) –periódico financiado con dinero de los costarricenses y que durante la campaña electoral de 2018 se mostró totalmente parcializado a favor de varias tendencias, en especial a la del Partido Acción Ciudadana (PAC)-, bachiller Cascante Saborío  buscase por todos los medios la manera de afectar mi candidatura.

Su posición en las redes sociales también evidenció su afán de cuestionar, sin mayores argumentos, las distintas posiciones que expresé a lo largo de la contienda electoral de 2018.

Las declaraciones que el 16 de enero de 2018,  hice en mi condición de candidato presidencial, ante el sector agropecuario, y en relación con la explotación petrolera, fue el pretexto ideal para que el periodista, en una nota que publicó ese mismo día, manipulara mi exposición… aunque su fotógrafo le obsequió unas buenas tomas, una de ellas imitándolo…

“Ambientalistas encienden las alarmas por declaraciones de Juan Diego Castro” fue el titular con que Luis Fernando Cascante y el Semanario Universidad trataron de convertir mis apreciaciones en una noticia sensacionalista.

En esa oportunidad, me referí a la posibilidad de explotar la riqueza petrolífera y de oro con que cuenta el país, con el propósito de que estos recursos contribuyeran con el desarrollo nacional.

Ese enfoque fue dejado de lado para convertirlo en una “amenaza”. Por esa razón Luis Fernando Cascante, con su pobre ética periodística, corrió a llamar a los ambientalistas para crear una visión totalmente sesgada de lo que yo había propuesto.

En el juego de la política todo se vale, más en la sucia,  parecía decir el proceder de Luis Fernando Cascante y el Semanario Universidad, con lo cual olvidaban que ese proceder no le correspondía a ningún periódico y mucho menos a un medio financiado con los impuestos de todos los costarricenses.

“Líderes ambientalistas encendieron las alarmas ante las declaraciones del candidato del Partido Integración Nacional, Juan Diego Castro, quien esta mañana abrió la posibilidad de explorar petróleo y oro en un gobierno suyo”.

En el decir está la trampa, como reza un viejo adagio muy popular en otros momentos. En este caso, la afirmación “abrió la posibilidad” deja claro primero, que, en efecto, era una opción que yo quería explorar; no obstante, es presentada como si fuera una realidad consumada, con lo cual se le presentaba al lector una visión y un panorama alterados.

Con esta nota salió a relucir que Luis Fernando Cascante, ahora en el Semanario Universidad, rodeado de muchos redactores incubados La Nación, se comportaba como ese grupo jefeado por Eduardo René Ulibarri Bilbao, que tiene como norte hacer de las noticias un campo de falsedades, inexactitudes y de jamás apegarse a la verdad de los hechos.

“Ante estas declaraciones, Mauricio Álvarez, presidente de la Federación Ecologista Costarricense (Fecon), afirmó que el discurso de Castro legitima un discurso de violencia sobre ambientalistas que en el pasado cobró vidas como la de Jairo Mora”. Canallas sin límites.

En su afán por alcanzar el mayor sensacionalismo posible, se cometen muchos atropellos como el de vincular una posición como la de explorar la posibilidad de utilizar un recurso natural con un asesinato. Grave, muy grave, que el Semanario Universidad hiciera un periodismo de tan baja calaña, a pesar de su bachillerato.

El juego sucio del periodista y del medio es muy delicado y si se piensa, de nuevo, que es un periódico universitario financiado con recursos, la ecuación termina por ser demasiado peligrosa. Con ello se evidencia, sin duda, el interés ideológico que seguía una línea editorial del Semanario Universidad y que apostaba a dañar mi imagen y mi candidatura.

El poder de los medios de la prensa canalla siempre ha estado al servicio de la casta codiciosa y esa es una característica que se conoce desde que existen, pero el hecho de que un medio con recursos estatales se una a esa nefasta práctica es un signo de gran decadencia y de él participó el Semenario Universidad de la mano en este caso del atrevido  Luis Fernando. a quien la prepotencia de bachiller, lo inflaban como poseedor de la verdad lo delata como un periodista-masa y sin rigor ético.

“Es una proyección de un discurso agresivo del neoliberalismo en cuanto al uso de recursos naturales. Más bien, el terrorismo tiene que ver con hacer a las personas tomar agroquímicos en sus acueductos. Este discurso puede animar a más violencia”, dijo su parcializada fuente… quien hizo un llamado a no votar por Castro ni por candidatos que empleen este discurso”.

El párrafo citado es una muestra inequívoca de cómo el periodismo irresponsable, apegado a una deontología y a un equilibrio, se deja de lado para dar paso al sensacionalismo de que una fuente ataque a un candidato, en este caso a mí, pero sobre todo a una persona, contra la que paradójicamente se incita a la violencia.

El periodismo decente es imprescindible para levantar el nivel cultural de sus ciudadanos, en el sentido de que el gran periodismo puede ser un bastión de desarrollo. Todo lo contrario a lo que sucede en Costa Rica y el punto oscuro de esa decadencia se percibe cuando un medio como el Semenario Universidad se presta para este tipo de prácticas, tal y como lo hizo durante la campaña electoral de 2018.

“Juan Diego olvida que existe la prohibición legal expresa de hacer minería metálica del oro a cielo abierto. Entonces primero debe modificar el Código de Minería. Respecto al petróleo existe una moratoria. Ahora, venir a decir que permitirá la explotación del oro y del petróleo es devolvernos a la edad de piedra en un país donde el oro está en nuestra biodiversidad. Este señor está hablando sandeces”, fueron las palabras del “profesor Sagot”  difundidas por Luis Fernando.

Llama la atención que en periodismo no se utiliza este tipo de categorizaciones, por eso identificar  a la fuente  como “el profesor” es un intento de darle una dimensión que no merece y a la vez justificar a “la autoridad invocada” ante, insisto, mi interés en profundizar en el tema.

Hemos visto a lo largo de este artículo, el bachiller  Cascante recurre a sutiles y constantes manipulaciones para desacreditarme, con lo cual atropelló los más elementales principios que todo periodista que se precie de serlo debe cuidar.

Al fin y por  acuerdo 11-05-20 de la sesión del  4 de febrero de 2020, la  Junta Directiva del Colegio de Periodistas, acordó registrar  Luis Fernando Cascante Saborío, como licenciado en Comunicación de Masas, de la Universidad Federada de Costa Rica. No de  la UCR donde trabajó en la campaña del 2018.